Durante ésta última semana nos reunimos en Mujeres Unidas y Activas (MUA), en shock, sintiendo miedo, dolor y coraje. También nuestros niños están sintiendo el impacto de lo que significa ésta elección para los Latinxs e inmigrantes de nuestras comunidades, y no encontramos las palabras para explicárselo o para consolarlos. Los mensajes racistas y xenofóbicos que llevaron a Donald Trump a la Casa Blanca y que ahora se reflejan en las personas a las que está nombrando como sus consejeros políticos; el anuncio reciente del nuevo presidente que su gobierno deportará o encarcelará a 3 millones de inmigrantes indocumentados; y el surgimiento de una cultura fuerte de odio, nos han hecho muy claro que estamos entrando en un periodo de crisis moral. Reconocemos que la manera en la que nosotros respondamos a éste momento será sumamente importante para nuestra sobrevivencia como comunidad y definirá en el proceso quienes somos. Así que nos negamos a responder con más odio. Nosotras visualizamos un mundo de amor, de justicia, de libertad y de igualdad, para encontrar maneras de hacer brillar nuestra luz en un momento de oscuridad.

Lo primero que nos queda claro es que en éste momento debemos sostenernos y protegernos lxs unxs a lxs otrxs. Nosotras en MUA queremos que las mujeres inmigrantes Latinas y sus familias sepan que no están solas. También aquellas mujeres que estén pasando por violencia o abuso en casa, en el trabajo o en las calles. Queremos que estas hermanas nuestras estén seguras de que aquí estamos, a su lado, y de que si llegaran a necesitar cualquier tipo de apoyo podrán encontrar un refugio en MUA. Nosotras estaremos alertas en nuestros esfuerzos para proteger a nuestra comunidad y seremos un lugar en donde la mujeres Latina inmigrante estará segura.

También estamos conscientes de que debemos ser bondadosxs lxs unxs con lxs otrxs y tenernos compasión. Conforme vamos procesando nuestras reacciones al racismo y al odio dirigido a nuestras comunidades, debemos permitirnos sentir las emociones que surjan en nosotrxs sin juzgarnos y sin rechazarnos lxs unxs a lxs otrxs. Y debemos modelar ésta compasión para nuestros niños, para proteger a sus corazones del odio que otros buscan plantar en ellos.

Permanecemos enfocadas y seguras de que nuestra lucha debe continuar. Tomaremos el odio dirigido hacia nosotras y lo transformaremos en fortaleza y determinación para seguir adelante. Hacemos un llamado a nuestras hermanas inmigrantes Latinas para que se unan a nuestros movimientos por la dignidad y la justicia. Las invitamos a cada una de ellas a que se den cuenta del valor y de la importancia de cada una de sus voces y sus contribuciones. El liderazgo de la mujer Latina se necesita ahora más que nunca. El amor, el cuidado, la valentía, la resiliencia y la perseverancia que nos enseñaron nuestras madres y nuestras abuelas se necesitan ahora más que nunca.

Y a nuestrxs hermanxs quienes son musulmanes, quienes son Negros, quienes son judíos, quienes son gay, lesbianas, trans o queer, personas con discapacidades físicas, e inmigrantes de todas partes del mundo, a todxs aquellxs que son vulnerables al odio encendido por el movimiento político de Donald Trump, nosotras les decimos que estamos en solidaridad con ustedes y les ofrecemos nuestro amor y nuestro compromiso político.

Finalmente, le pedimos a todos nuestros aliados que se unan a nosotras, que se imaginen las acciones más valientes de resistencia y que las tomen, y que hagan el trabajo tan importante de intentar cambiar los corazones y la mentalidad de aquellos en sus familias y sus comunidades quienes todavía no están en solidaridad con nosotras.

Dos días antes de las elecciones, las mujeres de MUA les pusimos un altar a nuestros ancestros para el Día de Muertos. Es gracias a ellos que sabemos que nuestra lucha para la justicia y la dignidad humana es sagrada. Y es gracias a ellos que tenemos la fortaleza y la sabiduría necesarias para luchar. Ellos sobrevivieron injusticias iguales o peores para darnos la oportunidad a nosotros de llevar su legado hacia adelante y de pasar las enseñanzas a nuestrxs hijxs. Así que honraremos a nuestros antepasados y lucharemos. Aquí estamos y no nos vamos.