Saltar al contenido

MUA denuncia la criminalización y la violación de los derechos humanos de los solicitantes de asilo

Entrada |
Creditos: Brooke Anderson

Como una organización creada por y para mujeres inmigrantes, expresamos nuestra continua indignación ante la criminalización, deshumanización y desprecio por la vida y seguridad de los inmigrantes y solicitantes de asilo por parte de candidatos prominentes y funcionarios electos en los Estados Unidos. Las mentiras descaradas sobre los inmigrantes haitianos en Springfield, Ohio, son solo un ejemplo de un cruel juego en el que los inmigrantes y solicitantes de asilo, la mayoría de los cuales no tienen derecho a votar, son tratados como si fueran responsables de los problemas de este país, a pesar de que muchos tienen trabajos esenciales en el cuidado y el sector de servicios y contribuyen con miles de millones de dólares en impuestos.

Estamos cansadas de ver a los dos partidos políticos competir por quién puede ser más cruel hacia las personas que huyen de la violencia, la persecución y los desastres climáticos. Entre los ataques más recientes es la nueva política llamada la Regla Final, lanzada el 30 de septiembre por la administración Biden.  Esto, en conjunto con el anuncio el 4 de octubre de la renuncia de el programa especial iniciado en 2022 para personas de Haití, Venezuela, Nicaragua y Cuba, es una decisión que tiene que ver con cálculos políticos en vez de una política de migración guiado  por el bienestar de la gente migrante ni de este mismo país.

En junio de este año, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) implementó una regla temporal que suspendió la elegibilidad de la mayoría de las personas que cruzan la frontera para solicitar asilo, a menos que tuvieran una cita programada previamente en un puerto de entrada oficial. Esta semana, la administración de Biden anunció una regla que haría permanente esa política. La Regla Final limita severamente la elegibilidad de asilo para quienes ingresan ilegalmente o sin autorización. También aumenta la capacidad del gobierno para aplicar rápidamente consecuencias a los cruces no autorizados, endurece los estándares para ciertas solicitudes de protección y acelera el proceso de deportación para aquellos que no califican bajo las nuevas directrices, que son extremadamente estrictas y complicadas.

Por esta razón, MUA ha expresado su apoyo a nuestros aliados en CGRS y otras organizaciones de derechos de los inmigrantes en la presentación de una demanda contra la administración de Biden para desafiar esta regla de cierre, que revive aspectos de las fallidas políticas fronterizas de la era Trump que fueron justamente anuladas por los tribunales. Exigimos la derogación de esta inhumana política fronteriza, ya que viola los derechos humanos y las leyes establecidas. Continuaremos abogando por un sistema de inmigración justo que priorice la seguridad de los solicitantes de asilo y respete los derechos humanos.

“Es una vergüenza que un país que promete proteger y respetar los derechos humanos sea el primero en dar la espalda y regresar a la muerte a nuestros hermanes,” comentó Juana Flores, Directora Ejecutiva de Mujeres Unidas y Activas. “Mujeres Unidas y Activas desaprueva fuertemente está y otras propuestas qué son inhumanas para nuestros hermanos qué vienen huyendo de la persecución de su país y lograr salvar su vida y las de sus familias. Exigimos procesos de bienvenida y solidaridad para las familias qué huyen en busca de salvar sus vidas e integridad. Seguiremos luchando para qué el derecho de asilo siga vigente”.